
sábado, 5 de marzo de 2011
viernes, 4 de marzo de 2011
Consejo Político Nacional del PRI
miércoles, 2 de marzo de 2011
Un PRI incluyente y de cara al futuro
1.- A un año y cinco meses de que se renueve el Poder Ejecutivo federal, el Partido Revolucionario Institucional se prepara para reconquistar la confianza ciudadana y regresar las ideas, la política y la visión de Estado a las oficinas de Los Pinos. Los resultados electorales alcanzados en 2010 sugieren un escenario donde el PRI luce como la fuerza política más competitiva del país. A 82 años de su fundación, el Revolucionario Institucional se muestra fortalecido, con una presencia viva y vibrante en cada uno de los dos mil 456 municipios de México.
2.- El aniversario de nuestro partido es una ocasión propicia para reafirmar nuestra vocación con la democracia y la justicia social. Para recordarle a la militancia la importancia de mantener cercanía con las demandas ciudadanas y transformarlas en propuestas legislativas incluyentes y de beneficio social. De combatir diversos rasgos de la visión neoliberal gobiernista, que piensa que el reparto de la riqueza nacional inicia con los que más tienen.
La esencia del priísmo es la democracia social que reivindica la necesidad de defender lo diverso y las causas sociales, de construir acuerdos mayoritarios para alcanzar un estado de derecho y mayor bienestar para los mexicanos. Es el origen de líderes, pensadores y políticos liberales. El Revolucionario Institucional es un referente para el mundo, en tanto que conservó el poder durante 70 años por su función social, su contribución a la política y al Estado democrático.
Y como diría don Jesús Reyes Heroles, "nuestra tarea fundamental es la actividad ideológica".
3.- Desde el PRI reconocemos la necesidad de hacer del diagnóstico, la planeación y la definición de metas un sistema de verificación permanente que permita evaluar lo hecho, lo que falta por hacer y la dinámica a instrumentar para insertar a México en las corrientes mundiales de comercio, desarrollo y bienestar, que hoy animan a economías emergentes como China, India e incluso Brasil.
4.- En nuestro aniversario, también me sumo al enorme reconocimiento nacional que los priístas compartimos respecto a la gestión de Beatriz Paredes Rangel, al frente de nuestro partido junto con el senador Jesús Murillo Karam, secretario general. Su mayor aportación ha sido convertir al partido en una opción real, ciudadana y actuante, condición indispensable para una competencia pluralista y democrática.
5.- El legado de la licenciada Beatriz Paredes Rangel va más allá de las numerosas victorias electorales que se alcanzaron bajo su liderazgo, ya que deja una esperanza para los mexicanos. Su éxito se mide en el hecho incontrovertible de que hoy el PRI se reconozca como el partido político más fuerte de México. Y es que Beatriz deja un partido con 184 diputados de mayoría y 53 plurinominales en la Cámara Baja, es decir, un crecimiento de 128 por ciento que, junto a las innumerables presidencias municipales ganadas y las 19 gubernaturas, hace que nuestro partido gobierne a 60 por ciento de los mexicanos.
6.- Tal ha sido su impacto político, que los partidos Acción Nacional y de la Revolución Democrática han hecho a un lado diferencias ideológicas y profundos agravios que se profirieron tras la elección presidencial de 2006, para conformar alianzas aberrantes que no hacen otra cosa que comprobar el profundo pragmatismo que los inspira.
Mucho ayudaría al país que ese mismo ánimo aliancista lo ejercieran en el Congreso de la Unión y en las legislaturas estatales, y no solamente en las urnas, donde lo único que demuestran es la ambición que tienen por ocupar puestos públicos.
7.- Por ello, no tengo duda que lo que ocurre en los otros partidos hace incluso más grande el reconocimiento que los priístas de México rendimos a Beatriz Paredes en la conclusión de su encargo.
Su fortaleza y congruencia marcan una enorme diferencia en el escenario nacional y entre los actores políticos de México, pues a partir de la transición partidista en 2000 el PRI se ha mantenido en una renovación constante. La oposición forma parte de la realidad republicana y ahora la renovación del partido está sostenida en el principio básico de gobernar mejor.
8.- Del mismo modo, celebro la llegada del profesor Humberto Moreira Valdés, exgobernador del estado de Coahuila, quien arriba a la Presidencia del PRI con la encomienda de conformar un frente amplio que consolide la alianza nacional priísta, permita la capacitación de cuadros y prepare al partido para conquistar el voto ciudadano en las elecciones venideras.
Los sentimientos de una nueva nación reconocen el liderazgo de nuestro próximo Presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI. De igual manera le hago llegar una felicitación a la diputada Cristina Díaz, próxima Secretaria General del CEN del partido.
El reto del PRI, con Moreira al frente, hombre de palabra directa y combativo, es lograr los consensos internos para impulsar a un candidato de unidad, que busque acuerdos y genere un trabajo incluyente en todo el territorio nacional.
9.- Así, el valor del Partido Revolucionario Institucional radica en el aporte que realizará a los mexicanos con un nuevo proyecto de nación que consolide la democracia tras diez años de malas políticas, retome con firmeza la negociación de las reformas necesarias para innovar y modernizar el Estado y reafirme su papel como enlace real entre sociedad y Gobierno.
10.- En esta nueva etapa del priísmo, no olvidemos que hay un México esperanzado en lograr un mejor futuro, como lo indican nueve millones de nuevos electores que votarán en 2012 por una nueva nación con rumbo, y la ruta para pasar de la esperanza a la realidad, sin duda, la tiene el PRI.
herrerafidel@hotmail.com
www.fidelherrera.blogspot.com
www.nuevanacion.org
miércoles, 23 de febrero de 2011
Fundamental impulsar reforma política: Fidel Herrera
· Se requieren acciones que garanticen el progreso y bienestar de los mexicanos.
· Coincide en que hay que reconfigurar las reglas para propiciar una real participación ciudadana en la toma de decisiones.
· Hay que cumplir con la exigencia de justicia, desarrollo y seguridad.
· Somos un país de fortalezas; tenemos que consolidar a nuestras instituciones.
En relación al discurso pronunciado por el Secretario de Gobernación, José Francisco Blake, en el marco de la ceremonia del 98 aniversario luctuoso de Francisco I. Madero, respecto a la necesidad construir a los acuerdos para alcanzar una reforma política a la altura de las circunstancias, coincidió en que hay que hacer un lado las ambiciones personales, y convino en que hay que reconfigurar las reglas para que haya una real participación ciudadana en la toma de decisiones.
Fidel Herrera reiteró que la reforma política no puede esperar más tiempo. “México requiere de normas que verdaderamente ataquen los problemas, que ofrezcan soluciones, más allá de los discursos retóricos. Los mexicanos exigen justicia, empleos, seguridad. “El país merece tener un desarrollo garantizado a través de acciones serias, inteligentes”, enfatizó.
Somos una nación con fortalezas, con instituciones que requieren ser consolidadas. “Somos un gran país con un enorme potencial para progresar y para tener un crecimiento enorme, para que todos los mexicanos tengan asegurado su bienestar”, resaltó Herrera Beltrán.
Subrayó que las propuestas que en la materia han elaborado el Poder Ejecutivo Federal y el Senado de la República tienen que ser analizadas y enriquecidas. Lo fundamental es escuchar la voz de todos los sectores sociales y productivos del país”, subrayó.
De las iniciativas, abundó el exmandatario veracruzano, se tiene que rescatar lo que se más viable, y refrendó que en estas tareas lo prioritario es privilegiar el diálogo, el acuerdo, los consensos entre las diversas fuerzas políticas del país.
Fidel Herrera resaltó que el Partido Revolucionario Institucional es una organización política responsable que ha propiciado la pluralidad, la unidad siempre abierto al diálogo y que ha sido el que ha impulsado las reformas políticas de la mayor trascendencia para la viabilidad del país, y de ahí que ahora resulte esencial reconfigurar las reglas para brindar una mayor participación ciudadana y alcanzar una iniciativa a la altura de las circunstancias que vive la nación.
Asimismo, apuntó la necesidad de fortalecer el federalismo, a través de medidas que se caractericen por el respeto, la cooperación y la articulación efectiva dentro de los ámbitos federal, estatal y municipal.
Y todo ello se puede lograr a través de una reforma política inteligente, adecuada, una reforma que cumpla con las expectativas que esperan todos los mexicanos.
La reforma fiscal urgente, Los sentimientos de una nueva nación
martes, 22 de febrero de 2011
Fundamental, impulsar una reforma política producto del diálogo y los acuerdos: Fidel Herrera Beltrán.
· Coincide en que hay que reconfigurar las reglas para propiciar una real participación ciudadana en la toma de decisiones.
· Hay que cumplir con la exigencia de justicia, desarrollo y seguridad.
· Somos un país de fortalezas; tenemos que consolidar a nuestras instituciones.
El exgobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, refrendó el imperativo de impulsar una reforma política que sea producto del diálogo y el acuerdo, porque lo más importante es que sea de beneficio para las mayorías, y exhortó a los actores políticos a unir esfuerzos para cumplir con el deber constitucional de propiciar una vida digna, de progreso, con empleos y todos los satisfactores para la población.
En relación al discurso pronunciado por el Secretario de Gobernación, José Francisco Blake, en el marco de la ceremonia del 98 aniversario luctuoso de Francisco I. Madero, respecto a la necesidad construir a los acuerdos para alcanzar una reforma política a la altura de las circunstancias, coincidió en que hay que hacer un lado las ambiciones personales, y convino en que hay que reconfigurar las reglas para que haya una real participación ciudadana en la toma de decisiones.
Fidel Herrera reiteró que la reforma política no puede esperar más tiempo. “México requiere de normas que verdaderamente ataquen los problemas, que ofrezcan soluciones, más allá de los discursos retóricos. Los mexicanos exigen justicia, empleos, seguridad. “El país merece tener un desarrollo garantizado a través de acciones serias, inteligentes”, enfatizó.
Somos una nación con fortalezas, con instituciones que requieren ser consolidadas. “Somos un gran país con un enorme potencial para progresar y para tener un crecimiento enorme, para que todos los mexicanos tengan asegurado su bienestar”, resaltó Herrera Beltrán.
Subrayó que las propuestas que en la materia han elaborado el Poder Ejecutivo Federal y el Senado de la República tienen que ser analizadas y enriquecidas. Lo fundamental es escuchar la voz de todos los sectores sociales y productivos del país”, subrayó.
De las iniciativas, abundó el exmandatario veracruzano, se tiene que rescatar lo que se más viable, y refrendó que en estas tareas lo prioritario es privilegiar el diálogo, el acuerdo, los consensos entre las diversas fuerzas políticas del país.
Fidel Herrera resaltó que el Partido Revolucionario Institucional es una organización política responsable que ha propiciado la pluralidad, la unidad siempre abierto al diálogo y que ha sido el que ha impulsado las reformas políticas de la mayor trascendencia para la viabilidad del país, y de ahí que ahora resulte esencial reconfigurar las reglas para brindar una mayor participación ciudadana y alcanzar una iniciativa a la altura de las circunstancias que vive la nación.
Asimismo, apuntó la necesidad de fortalecer el federalismo, a través de medidas que se caractericen por el respeto, la cooperación y la articulación efectiva dentro de los ámbitos federal, estatal y municipal.
Y todo ello se puede lograr a través de una reforma política inteligente, adecuada, una reforma que cumpla con las expectativas que esperan todos los mexicanos.
sábado, 19 de febrero de 2011
LAMENTA FIDEL HERRERA BELTRÀN EL FALLECIMIENTO DEL ILUSTRE INTELECTUAL, DON JOSÉ ITURRIAGA SAUCO
Don José, quien murió en las primeras horas de este sábado, nació en la ciudad de México en 1914, pero desde hacía 15 años residía en el municipio veracruzano de Coatepec, desde donde fue trasladado a la capital del país para ser atendido de los problemas de salud que presentaba y que extinguieron su vida, “vida prolífica y fundamental para el desarrollo de la nación, pues fue un formador de generaciones que han fortalecido las instituciones del país”, subrayó Herrera Beltrán.
Recordó que recientemente el Congreso de Veracruz entregó al ameritado mexicano que escribió, entre otras obras, “La Estructura Social y Cultural de México”, fundamental para el conocimiento de la nación, la medalla “Adolfo Ruiz Cortines”, Presidente de la República con el que colaboró precisamente para la consolidación de la cultura,
Herrera Beltrán recordó que Iturriaga Sauco, capitalino de nacimiento, veracruzano de alma y corazón, fue propietario de una de las bibliotecas mas grandes del país, misma que se encuentra en su casa de Coatepec.
El exmandatario veracruzano también rememoró otras obras literarias escritas por Don José, como “México en el Congreso de los Estados Unidos”, “El Tirano de América Latina” y “Pensamiento Político del Presidente Juárez", entre otras.
miércoles, 16 de febrero de 2011
Defender al campo mexicano, Los sentimientos de una nueva nación
domingo, 13 de febrero de 2011
Cumbre Tajín
viernes, 11 de febrero de 2011
XXIII Congreso Nacional Ordinario de la CTM

El día de hoy rindió protesta Adrián Jesús Sánchez Vázquez como secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industria Azucarera y Similares de la República Mexicana de la CTM, para el periodo 2011 - 2017.
Asistí a este evento y tuve la fortuna de saludar a Javier Lozano, secretario del Trabajo; el sr. Joaquín Gamboa Pascoe, líder de la CTM; el senador Carlos Aceves del Olmo; y el representante de la OIT en México, Germán López.
Durante la ceremonia también se llevó a cabo la Toma de Protesta del Comité Ejecutivo Nacional de este sindicato.
miércoles, 9 de febrero de 2011
Propuesta de carta de navegación para México, Los sentimientos de una nueva nación.
jueves, 3 de febrero de 2011
Fiestas de Tlacotalpan
FHB
miércoles, 2 de febrero de 2011
El rumbo de una nueva nación
lunes, 31 de enero de 2011
Nueva nación
sábado, 29 de enero de 2011
Recordando visita al Delfinario de Veracruz.
viernes, 28 de enero de 2011
jueves, 27 de enero de 2011
Libro: Acción y Reflexión.
miércoles, 26 de enero de 2011
Alimentación para un México fuerte con mexicanos fuertes, Los sentimientos de una nueva nación
La mayoría de los países defienden comercialmente al sector agrícola y lo insertan en políticas públicas de desarrollo tecnológico como el mejoramiento de semillas, de infraestructura e incluso de tareas de expansión agraria.
La Unión Europea mantiene a la fecha programas de apoyo a su campo.
También los hay en Asia, en África e incluso en Estados Unidos.
Por lo tanto, es necesario revalorar el papel del sector agropecuario en el desarrollo económico, y otorgar a los problemas del campo el carácter de asuntos de seguridad nacional.
Para la economía nacional, los sectores agrícola y agropecuario son fundamentales para lograr la soberanía alimentaria.
Además, ofrecen grandes ventajas en ramas industriales muy diversas, que van desde las actividades de transformación hasta la distribución comercial de productos.
El campo es también una herramienta fundamental para generar divisas y, con una planeación adecuada, nos ayuda a proteger el medio ambiente, la biodiversidad y la propia cultura nacional, de la que la tradición alimentaria ha sido un soporte fundamental.
En el siglo XXI, 20 millones de mexicanos no tienen seguridad alimentaria ni patrimonio alimentario.
El deterioro ambiental sigue creciendo, el agua se termina, la erosión del suelo avanza, y la productividad y la competitividad son bajas.
La política económica nacional ha orientado sus esfuerzos a las economías de gran escala, dejando al margen a la mayor parte del territorio, particularmente a las poblaciones rurales e indígenas, en donde la producción doméstica aún tiene mucha relevancia.
Ahora en este año la estabilidad de precios es fundamental.
Por poner sólo un ejemplo, el limón está por encima de los 30 pesos el kilo (hay lugares donde llega a 50 pesos).
Con el salario mínimo de 2011 (58 pesos diarios) un trabajador no podría comprar ni siquiera dos kilos de limón.
Lo mismo ha pasado con el tomate (diez pesos el kilo), con el chile (diez o 12), la cebolla está por encima de los 11 pesos, el aceite cerca de los 20 pesos.
Tenemos que trabajar en conjunto para lograr esa ansiada estabilidad.
La falta de una visión hacia el desarrollo rural sustentable ha ocasionado que la productividad del campo mexicano se minimice, al mismo tiempo que aumenta nuestra necesidad de importar productos agrícolas.
Este círculo vicioso no termina ahí.
La falta de apoyo al sector primario se ha traducido en una creciente migración de la población rural hacia los centros urbanos o hacia Estados Unidos, en busca de mejores oportunidades laborales.
Por estas razones el campo mexicano demanda soluciones efectivas y acciones inmediatas.
Una nueva nación demanda un país bien alimentado, un país próspero en el que nuestros niños crezcan con una alimentación balanceada.
Los sentimientos de una nueva nación proponen el trabajo en conjunto del Gobierno con la sociedad.
Pero, además, es necesario que pongamos atención en la operatividad y eficacia de programas como Oportunidades, el Seguro Popular, Proárbol y los de Atención a Adultos Mayores, porque la política social de nuestro país debe avanzar hacia una mayor transparencia en su ejercicio, y buscar deshacerse de prácticas que comprometen su efectiva aplicación.
La crisis alimentaria no se debe a la falta de alimento, sino de una falta de planeación.
Por eso debemos atender la creación de una política mexicana para la alimentación, para que exista un proceso de distribución funcional.
La solución es integral, pues debemos reforzar la educación, pero no podemos dejar de lado el apoyo al campo mexicano.
Después de tantas inversiones públicas cuantiosas contra la pobreza, el país tiene a la mitad de su población viviendo en algún tipo de miseria -alimentaria, patrimonial o de capacidades.
La política social es indispensable para compensar la desigualdad y promover el desarrollo individual y colectivo del pueblo mexicano.
Debemos enfrentar esta época con el combate a la pobreza, con instrumentos que puedan fortalecer el desarrollo del campo mexicano, y de la creación de empleos en todo el país.
Por eso ahora debemos entrar en una etapa de precisión y puntualidad: es hora que desde el Congreso se perfilen los acuerdos que requiere México.
Y con estos acuerdos, podríamos darle a la nación la igualdad de posibilidades a la que nos obligan nuestras leyes.
No podemos tolerar la escalada en los precios: queremos un país en el que los salarios alcancen para adquirir los productos básicos para el desarrollo de la familia.
La solución se requiere de inmediato para el desarrollo de una nueva nación.
miércoles, 19 de enero de 2011
El Acuerdo Nacional, Los sentimientos de una nueva nación
Necesitamos transformar el presidencialismo
Si bien nuestro modelo institucional construido por los diputados constituyentes establece la división y el equilibrio de Poderes, la conducción de la vida pública ordenada y con progreso de la nación se debió en gran medida al liderazgo y capacidad de nuestros Presidentes para lograr consensos.
Estudiosos del tema acuñaron el concepto de la preminencia de las funciones metaconstitucionales del Presidente para explicar sus habilidades de suma y consenso, así como la estabilidad que dio al país durante varias décadas de crecimiento y paz social.
La buena marcha de la nación y sus instituciones en la segunda mitad del siglo pasado prepararon el terreno para la formación de una sociedad participativa, expresiones partidistas sólidas y competitivas, y el arribo de la regularidad democrática, en la que ni el triunfo es para siempre, ni éste es previsible previamente a los procesos electorales.
Con la llegada de la alternancia, los Gobiernos divididos y el régimen de partidos fuertes debemos pensar cómo y hacia dónde transformar el presidencialismo, signo fundamental de la democracia mexicana del siglo XX.
Si lo hacemos, lograremos superar las barreras de comunicación entre los distintos Poderes Públicos.
Si lo hacemos, podremos construir reglas electorales para aumentar la participación ciudadana y fortalecer la credibilidad del mexicano en sus políticos y sus instituciones.
En la opinión pública internacional se dice que el nuestro es de los pueblos que menos cree en su Gobierno y en sus instituciones.
La revaloración de nuestro presidencialismo debe partir de revisar el sistema federal para aprovechar sus ventajas: mejores inversiones, compromisos claros con la sociedad, incluso con medidas que ayuden a eliminar la corrupción.
El senador Manlio Fabio Beltrones propuso la modernización del Sistema Presidencial Mexicano.
Para ello propuso siete "erres" importantes para conseguir esa modernización, a través de distintos matices parlamentarios que, seguramente, fortalecerían la funcionalidad del presidencialismo mexicano.
Entre otras facultades propuso:
Ratificación de los nombramientos del gabinete por el Senado.
Reelección legislativa y en municipios, a efecto de que la rendición de cuentas determine el sufragio ciudadano.
Reorganización del Gobierno federal suprimiendo duplicidades y reduciendo los altos mandos burocráticos.
Referéndum en reformas constitucionales importantes, con excepción de temas fiscales, electorales y de seguridad nacional.
Revocación de mandato en aquellos casos de notoria ineficiencia, incompetencia o conducta lesiva de los servidores públicos electos.
Rendición de cuentas que se base en el Plan Nacional de Desarrollo, combinado con el nuevo formato del informe presidencial, con la figura de la pregunta parlamentaria y la comparecencia bajo protesta de decir verdad.
Regulación económica moderna en la cual diversas comisiones como la Cofetel, la Reguladora de Energía y la de Competencia sean autónomas, funcional y operativamente.
En estas iniciativas coinciden Los Sentimientos de una Nueva Nación, pues son el marco de medidas estratégicas que plantean cómo el Ejecutivo federal, sin dejar la figura presidencial, puede construir políticas públicas eficaces.
Además se pueden construir políticas consensuadas, aceptadas por sus beneficiados y avaladas por todas las fuerzas políticas concurrentes.
La salud, la educación, el combate a la marginación, el aumento de la productividad, el cambio climático, la digitalización, entre otros, son programas sectoriales que requieren estímulo y aliento; requieren además de inversión pública y programas eficaces.
La reforma del presidencialismo es la primera pieza de una reforma mayor; es sin embargo el paso primero sin el cual no es posible dar otros: ¿para qué y hasta dónde? La respuesta es clara: debemos cambiar para mejorar pero sobre todo, cambiar para gobernar y dar resultados utilizando los instrumentos de política institucional.
Este es el camino hacia una nueva nación de justicia y libertades.
miércoles, 12 de enero de 2011
Los sentimientos de una nueva nación, La reforma urgente
Necesitamos reactivar el empleo, para que todas las familias mexicanas mejoren. La llegada del siglo XXI nos obliga a construir herramientas novedosas y eficientes en el servicio público.
La situación en la que viven los más pobres de nuestra sociedad nos exige actuar con audacia y rapidez.
El senador Manlio Fabio Beltrones tiene razón al preguntarse cuál es el camino que estamos construyendo para México. El Presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República asegura que la transición demográfica es un cambio significativo en la próxima década, que debe ser razón para tomar decisiones a tiempo.
Este es el momento de crear empleos y dinamizar el mercado interno; es el tiempo de atraer mayores capitales y consolidar el desarrollo nacional. Es el tiempo de las reformas que nuestro país necesita.
Debemos ser capaces de hacer crecer nuestra economía a ritmos más acelerados. Para ello necesitamos un programa para México que genere empleo para los futuros cinco millones de jóvenes que entrarán al mercado laboral en los próximos años.
Tenemos la obligación de trabajar por los que en veinte años serán adultos mayores y necesitarán un sistema de pensiones que les resuelva sus necesidades más apremiantes.
El trabajo debe ser muy amplio y tiene que llegar a las comunidades más alejadas. Debemos llegar a los indígenas, a los campesinos, a los obreros. Debemos ayudar a las mujeres y a los niños; a los trabajadores, a las cabezas de familia, los adultos mayores que enfrentan nuevos obstáculos en su vida y su salud.
Debemos trabajar por todos aquellos que requieren de un programa de seguridad social; todos aquellos que necesiten mejor educación y mayores oportunidades para el desarrollo de su familia.
Reformar es también una actividad política. En los próximos 10 años el país incrementará su fuerza laboral. Debemos construir desde las instituciones un acuerdo que nos permita generar empleos, disminuir la pobreza y mejorar la calidad de vida de la familia mexicana.
El consenso debe surgir de la convicción, y sobre todo, de la determinación y convencimiento de que México requiere ajustar el rumbo.
Desde el Congreso de la Unión se pueden construir los acuerdos para que el 2011 pueda ser el año del crecimiento en el empleo y la seguridad.
La reforma urgente implica cambios en el gobierno. Una reforma política es inaplazable.
Los nulos resultados de la administración federal hacen evidente la necesidad de articular "propósitos comunes", como lo menciona el senador Beltrones.
Por eso las instituciones de México deben ser las que den el ejemplo a los ciudadanos. Desde ellas debemos evitar el uso de los recursos públicos para fines electorales, debemos fortalecer al Estado como rector de la economía para fomentar el trabajo.
Dice el Gobierno federal que durante 2010 en México se generaron cerca de 700 mil empleos, el mejor registro en los últimos 14 años. Sin embargo, son insuficientes para incorporar año con año a más de un millón de jóvenes que ingresan a la actividad productiva.
Tenemos que definir el rumbo que vamos a tomar en el futuro.
Los problemas más urgentes que debemos resolver son la pobreza y la desigualdad. De igual modo tenemos que encontrar soluciones a la falta de oportunidades para el empleo y disminuir los altos índices de violencia que tenemos en algunas zonas del país.
Ahora es tiempo de construir una nueva nación, con un gobierno capaz de atender a la población, y sobre todo, capaz de entregar resultados.
Asumamos la responsabilidad a través de un programa incluyente, que erradique la desigualdad y que mejore la calidad de vida.
A partir de una alianza con los diversos sectores sociales, podemos construir un verdadero programa para México, que nos permita entrar en la ruta del crecimiento.
La raíz republicana en México nos recuerda que tenemos que poner por delante los intereses de nuestro país con el objetivo de fomentar el desarrollo y el crecimiento.
Ahora que sufrimos una crisis en la seguridad de nuestras familias, tenemos que trabajar por un país unido, consciente, que pueda disminuir sus índices de violencia, que pueda crecer en sus indicadores económicos.
Por eso con gran determinación buscamos articular todos los esfuerzos que nos permitan reformar la producción del campo y las ciudades.
La integración de nuestro país debe ser construida desde un programa nacional de crecimiento, que fortalezca a los gobiernos municipales y estatales.
Debemos encontrar las soluciones de fondo para construir una nueva nación.