miércoles, 16 de julio de 2014

Reforma Energética, puntal del desarrollo de México I

[Primera de tres partes]


1.- Los objetivos de la Reforma Energética que impulsa México son de largo alcance. Por un lado buscan fortalecer el papel del Estado mexicano como rector de las industrias de la electricidad, el gas y el petróleo; asegurar la viabilidad energética a futuro; y crear o en su caso reforzar las instituciones reguladoras del sector en un marco de absoluta transparencia.



2.- También tienen por intención reafirmar el desarrollo sustentable; garantizar un crecimiento económico sostenido que permita la creación de más y mejores empleos; y permitir al país alcanzar mejores niveles de competitividad internacional al ofrecer a sus fuerzas productivas y a las familias energía suficiente y a menores costos.



3.- La enorme tarea es llevar a la concreción estos objetivos, y más compleja aún explicitarlos, ampliarlos en las leyes secundarias. Se trata de respetar nuestras luchas históricas y transformarlas en un poderoso factor de modernización para usar nuestras riquezas como palancas que permitan alcanzar una sociedad más igualitaria y con más oportunidades sociales.



4.- El avance alcanzado en las industrias petrolera, hidráulica, geotérmica, eólica, del gas y nuclear son logros alcanzados por el Estado mexicano. PEMEX es una de las compañías más importantes del mundo en la producción de crudo, y ha sido el motor del desarrollo nacional a lo largo de las últimas décadas.Sin embargo, nuestros yacimientos petroleros han disminuido su capacidad al pasar de una producción de 3.5 millones de barriles diarios en 2004 a 2.5 millones en 2014. México no cuenta con el capital necesario para recuperar esos niveles productivos, dado que casi un 40% de nuestro Presupuesto de Egresos se financia de la renta petrolera, lo que impide a la paraestatal realizar las costosas inversiones que exigen las nuevas tecnologías.



5.- Pemex y CFE requieren de enormes recursos para realizar las cadenas productivas del petróleo -incluyendo exploración, extracción, comercialización y petroquímica básica y secundaria- y de la energía eléctrica. Importamos alrededor del 50% de las gasolinas que consumimos y en petroquímica dependemos en gran medida del exterior. En el caso del gas, importamos el 30% del consumo interno y no contamos con los ductos y líneas necesarios para su distribución.



6.- Por su parte, en el renglón de la generación de energía eléctrica, la CFE ha logrado proporcionar este servicio al 92.3% de nuestra población, apoyada por inversiones de la iniciativa privada en energías renovables que abastecen alrededor del 30% de la demanda. Sin embargo, sus altos costos de producción y otros factores como pérdidas técnicas en las líneas de transmisión y distribución, limitan su desarrollo.



7.- Ante esta realidad, el Ejecutivo envió al Congreso de la Unión una iniciativa de reforma energética que fue aprobada el 18 de diciembre de 2013, después de seguir su cauce legal. El Decreto de ley se publicó en el Diario Oficial de Federación el día 20 de diciembre de 2014, y en él se establecen modificaciones a los artículos 25, 27 y 28 de nuestra Carta Magna en materia de energía.



8.- Como resultado de esta reforma constitucional, el Ejecutivo presentó a la Cámara de Senadores del Congreso un paquete de legislación secundaria que comprende modificaciones a 21 leyes agrupadas en nueve iniciativas de ley.



9.- La complejidad del estudio de los temas que plantea esta gran reforma, así como las implicaciones legales que conlleva, han sido motivo de profundas reflexiones entre especialistas y desde luegoentre la gran mayoría delos legisladores de ambas Cámaras que han mostrado, sin renunciar a sus principios e ideologías, un compromiso cabal por ofrecer un marco jurídico que se ajuste a las necesidades de un México moderno y próspero.



10.- La Reforma Energética sigue su cauce. Las leyes secundarias le darán sustento jurídico y abordaremos su análisis en las próximas dos entregas.



@FidelHerrera

+Fidel