jueves, 16 de agosto de 2012

Los coordinadores priístas del Congreso de la Unión


16 de Agosto de 2012
El próximo 1 de septiembre darán inicio los trabajos de la LXII Legislatura del Congreso de la Unión. Senadores y diputados electos, representantes de todas las posiciones políticas de la nación, en un esfuerzo conjunto, desplegarán un diálogo constructivo que les permitirá diseñar los instrumentos jurídicos que normen las políticas públicas que demanda México en este momento histórico. El reto no es menor.
El Partido Revolucionario Institucional se prepara para asumirlo y la elección de sus coordinadores parlamentarios, tanto en el Senado de la República como en la Cámara de Diputados, indica que la política del cambio, consensuada con las fuerzas políticas nacionales, será la que se construya el nuevo rumbo del país.
El PRI elige a dos hombres de gran estatura política: Manlio Fabio Beltrones y Emilio Gamboa Patrón. El primero, coordinará a los priístas en la Cámara de Diputados y cuenta con un alto reconocimiento político por parte de todos los partidos políticos por su seriedad en el manejo de los asuntos públicos, liderazgo y gran capacidad negociadora. El segundo, encabezará la fracción priísta en el Senado, político con gran formación y experiencia, lo que le permitió un atinado manejo de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares durante el proceso electoral pasado, contribuyendo así a la victoria de Enrique Peña Nieto.
A las características personales atribuibles a estos líderes priístas, se añade una trayectoria reconocida y capacidad interlocutoria sustentada en el diálogo como el único camino posible para la construcción de acuerdos, lo que indica la importancia que el PRI dará al Poder Legislativo para sustentar la nueva estrategia del desarrollo de México.
El PRI va a gobernar para todos y buscará que las políticas públicas que impulse tengan la legitimidad política que brinda el apoyo de la mayoría de las organizaciones y partidos políticos de la nación.
El reto inmediato está en impulsar las reformas estructurales que deben ser abordadas en el Congreso: la fiscal integral, la energética, la laboral y la de seguridad pública, prioritarias para el México actual.
Hemos logrado lo que muchos países aún buscan: un sistema de renovación de poderes encauzado institucionalmente, que brinda certeza tanto a electores como a inversionistas que ven en nuestro país un lugar de oportunidades. Estamos ante un México con esperanza y un gran deseo de salir adelante. Tengo la certeza de que ese México empezará a hacerse realidad el 1 de septiembre.